VIH
+, es mi actual condición de salud. Cuando supe mi condición de portador,
pensé en mi futuro, en mi familia, lo primero que vi al llegar a mi casa fue el
hermoso rostro de mi madre. En especial me detuve a pensar en los prejuicios de
nuestra sociedad venezolana para con personas portadores del virus de VIH, tal
situación me deprimió muchísimo en ese momento y más ver a tanta gente dividida
cuando en resumen todos somos iguales. Sin embargo tome la posición de que todo
no es más que un nuevo comienzo, una nueva oportunidad en la que DIOS en su
infinita bondad me estaría ofreciendo.
En
otras circunstancias o meses atrás hubiese escrito algo más melodramático, pero
con el pasar del tiempo he aprendido a ser positivo en todo el sentido y
expresión de la palabra, entendiéndose por definición de Positivo: Algo
verdadero que no ofrece duda; es la oposición a la negatividad, es una persona
que busca la realidad de las cosas y su aspecto práctico. Como lo ven, es
sencillo, no puedo darme el lujo de deprimirme (aunque a veces es rico hacerlo)
no puedo detenerme a pensar en el hubiera o el por qué,
no puedo ir a buscar culpables porque soy consciente de mi responsabilidad y mi
falta de cuidado y criterio en el momento en que lo adquirí.
En
resumen, lo importante es aprender a vivir con este virus, luchar por vencer
los prejuicios sociales que son más letales que el propio VIH, vencer la
indiferencia y la desigualdad. En realidad agradezco a Dios por todo esto por
las nuevas experiencias que estoy atravesando con honor y dignidad, por la
familia que tengo y los amigos que siempre están a mi lado, todos son mi motor
para seguir en este camino tan irregular que es la vida, sorteando toda clase
de obstáculos que se nos coloca en el andar diario, le doy gracias a Dios por
todo lo que me ofrece y si esta es su voluntad – SER PORTADOR DE VIH – lo
recibo con humildad, como prueba a cada día ser mejor persona y lo más
importante es que con mi experiencia pueda ayudar a otros y
concientizar en la prevención del contagio y evitar que el VIH-SIDA siga propagándose.
Una
vez escuche que la vida es como la flor del cerezo o Sakura “Breve pero
hermosa”… y lo es en realidad, valoremos cada momento de nuestras vidas,
si tienen que decir algo “háganlo” no repriman sus emociones, no nos dejemos
vencer por esto que se llama VIH, como católico que soy pido a Dios toda la
fuerza necesaria para soportar esta carga y pido la protección de la Virgen María a quien
amo por sobremanera, DIOS vive en mi corazón y ruego por todos quienes a causa
del VIH-SIDA han partido al reino invisible y nos iluminan con su Luz de Amor. No
es el final, es un nuevo comienzo y el principio de cosas maravillosas, adiós
al pesimismo adiós a la tristeza no perdamos el tiempo.
¡SEAMOS
POSITIVOS CON ORGULLO¡